López Ruiz, Oscar. Piazzolla, loco, loco, loco. 25 años de laburo y jodas conviviendo con un genio. Buenos Aires: Gourmet Musical, 2018.

Piazzolla, loco, loco, loco. 25 años de laburo y jodas conviviendo con un genio es una reedición del libro publicado en 1994 por Ediciones de la Urraca. El contenido no varía, salvo unas pocas anécdotas agregadas al final. La edición de Leandro Donozo es muy oportuna pues hacía muchos años que estaba agotado. Mejora la original en varios aspectos, el más notorio es la inclusión del siempre útil índice temático.

Es un libro muy entretenido por la cantidad de anécdotas entre curiosas y desopilantes compiladas por Oscar López Ruiz, guitarrista de los quintetos de Piazzolla de la época más interesante del bandoneonista. Participó en las grabaciones de 1961 a 1965 en las cuales se observa progresivamente la plasmación del Nuevo Tango de Piazzolla y luego en las de 1967 y 1969 (en el álbum Adiós Nonino del sello Trova, uno de los más interesantes del quinteto). Finalmente estuvo en 1971 y 1972 en los discos del mítico noneto. Luego colaboró con Piazzolla entre 1979 y 1984, durante la segunda etapa del quinteto acústico, en la que López Ruiz encuentra que el impulso renovador de Piazzolla ya no era el mismo de antes.

Durante toda la década del sesenta el autor participó de innumerables giras por las provincias de Argentina, tocando en los lugares más insólitos, y estuvo presente en las largas temporadas de café concert en las que se presentó el quinteto, en sitios pequeños como Jamaica y 676 en Buenos Aires. Su testimonio es muy interesante para comprender el funcionamiento de parte de la escena musical de la década de 1960.

Además, López Ruiz se refiere permanentemente a la música: qué tocaban, cómo ensayaban, y a las grabaciones. Cada vez que menciona un tema técnico introduce en nota una explicación para el lego en la materia, siempre correcta y precisa. Para un lector experto son superfluas, pero al estar en notas no molestan la lectura. No obstante, el eje de la narración son las innumerables anécdotas provocadas por el sentido del humor de Piazzolla, que era un bromista inveterado ―de munición gruesa―.

Por estas memorias desfilan, también, infinidad de personajes: Aníbal Troilo, Hermeto Pascoal, Horacio Guarany, Jorge Luis Borges, Carlos Menem, son una muestra en la ecléctica lista de personalidades involucradas de alguna manera en el profuso anecdotario.

Cualquier investigador que quisiera ahondar el conocimiento de algún aspecto de la vida o la obra de Piazzolla a través de una entrevista con López Ruiz, difícilmente podría pensar una buena pregunta cuya respuesta no estuviera en este libro: los aspectos luminosos y oscuros de la personalidad de Astor; su postura política; su relación con la música, el tango, los tangueros; su cultura; su empecinamiento por llevar la música hacia adelante; su calidad de músico y su oficio de compositor son algunos de los innumerables temas tratados.

Una lectura imprescindible para cualquier amante del tango y muy recomendable para quienes se interesen por la escena musical de los sesenta en Argentina; sobre todo, muy divertida.

 

Omar García Brunelli